Una de las grandes preguntas que se hacen los clubes de fútbol cuando un talento comienza a emerger en ligas o equipos de niveles inferiores es el de poder imaginar y proyectar si las cualidades de dicho jugador podrían alcanzar el nivel de exigencia y calidad requeridos en caso de ficharlo. Como en muchos aspectos del mundo del fútbol, entender el contexto para tomar decisiones es absolutamente indispensable. No en vano, este aspecto es lo que diferencia a un buen ojeador o área de scouting: imaginar si lo que detectan de un futbolista, su talento, tendría el mismo valor y rendimiento al proyectarlo en un contexto completamente diferente. La misión, por tanto, no es sólo observar que un jugador tenga grandes cualidades, sino intentar medir si el jugador y sus capacidades rendirían igual de bien cuando las demás variables se alteran, circunstancias que también diferencian a una consultoría futbolística a la hora de detectar y discriminar talento. Lo importante no es ver lo que aún no ha visto nadie, sino pensar lo que aún no se ha pensado sobre lo que todo el mundo ve.
Jugando con una primera vista de paracaidista quizás veamos a muchos futbolistas mezclados con otros que no destacan entre estadísticas globales o comparativas, en las que sólo se tiene en cuenta el rendimiento en base a eventos (pases, tiros, despejes, robos, etc) y métricas por volumen, pero eso sería perdernos demasiada información valiosa a la hora de detectar y visibilizar rendimientos más ocultos. Puede ocurrir que en un equipo de menor potencial y expectativas de juego, con dificultades para competir ante buena parte de equipos de su campeonato y obligado a ser dominado y no poder lucir un juego más protagonista, encontremos jugadores que nos den más de una pista de lo que podría ocurrir una vez fuesen fichados por otro club diferente. Potenciados por otro contexto más favorecedor su valor podría ser otro completamente distinto.
Utilizaremos algunos ejemplos claros, sirviéndonos de algunas de las muchas funcionalidades presentes en las plataformas de Driblab, para ayudar a los clubes a interpretar el contexto y poder proyectar el talento encontrado en equipos de muchas más posibilidades técnicas y tácticas.
Caso 1. En el verano de 2017, el Liverpool de Jurgen Klopp fichó al lateral escocés Andy Robertson, hoy uno de los mejores laterales izquierdos del mundo. En aquel momento, Robertson se encontraba en el Hull City, equipo que descendió semanas antes a Championship, y cuyo radar de rendimiento general por volumen y comparado con los laterales de las cinco grandes ligas no mostraba un rendimiento especial o relevante. En equipos que no pueden hacer lucir a sus jugadores cada día, toca rascar en profundidad.
Modificando nuestros radares para encontrar valores relativos, calibrando el porcentaje de importancia del jugador dentro del equipo, encontramos interesantes capacidades en el futbolista, las cuales pueden indicarnos que proyectados por un colectivo con más calidad media en sus jugadores el futbolista podría despegar y aumentar la frecuencia y el valor de sus acciones hasta el primer nivel, en este caso de la Premier League. Utilizando valores relativos al colectivo, las llamadas estadísticas ‘en equipo’ (‘In Team’), observamos que Robertson, siendo lateral, tenía un gran impacto en las progresiones en campo rival, pases clave o pases al área del Hull City.
Caso 2. El del venezolano Darwin Machis. Su equipo, el Granada, de la mano de su exentrenador, Diego Martínez, realizaba un tipo de juego muy enfocado en incomodar desde su defensa a los rivales y de ser un equipo muy directo en la búsqueda del gol y su progresión sobre el campo hasta llegar al área. Esta forma de competir quizás impedía sacar una lectura inmediata del rendimiento de algunos jugadores, como vemos en el radar de rendimiento comparativo de Darwin con sus compañeros de demarcación en las cinco grandes ligas.
Sin embargo, si matizamos algunos parámetros y activamos el valor de Darwin dentro del equipo, entrando en contexto colectivo, observamos que Machis protagoniza un gran porcentaje de acciones de gran valor en la creación de goles esperados, llegadas al área o toques en área rival dentro del Granada, dándonos pie a poder pensar que si en un contexto de menos posibilidades destaca en algunas acciones y momentos del juego, rodeado de más posibilidades su talento podría crecer sin frenos. Buscando por porcentaje y contexto y no tanto por volumen y comparación, hallamos valor extra y podemos hacernos una idea de la determinación o el potencial de un jugador si en el futuro transporta todo su talento a un entorno diferente.
Somos Driblab, una consultora especializada en el análisis estadístico de jugadores y equipos; nuestra labor se centra en asesorar y minimizar el riesgo en la toma de decisiones en el fútbol profesional en áreas relacionadas con la detección de talento y evaluación de perfiles. Nuestra base de datos cuenta con más de 180.000 jugadores de más de 180 competiciones diferentes, abarcando así información de equipos de todo el mundo. Aquí puedes conocer mejor cómo trabajamos y qué ofrecemos.